Oviedo es una ciudad perfecta para poder recorrer en un fin de semana. Sus múltiples ofertas culturales, gastronómicas y turísticas harán que no te dé tiempo a aburrirte. Aquí te ofrecemos una pequeña guía orientativa para poder organizar más fácilmente tu visita por la capital del Principado y que no te quede nada por ver.

Viernes

El primer día es perfecto para recorrerse el centro de la ciudad y asi tener una primera toma de contacto con la capital. Comenzando por la calle Uría, arteria principal ovetense, se puede continuar por el Paseo de los Álamos, aprovechando así para disfrutar del pulmón de Oviedo, el Campo San Francisco. A continuación, se puede continuar hacia el casco antiguo, donde encontraremos la joya arquitectónica de la ciudad: la Catedral. Dede allí, es recomendable moverse por todo el casco y poder ver el resto de monumentos, como es el caso de la muralla romana o el edificio histórico de la Universidad de Oviedo. En esta zona se encuentra también la Plaza de la Constitución, donde se encuentran tanto el edificio del Ayuntamiento como la Iglesia de San Isidoro el Real. Si se quiere hacer un alto en el camino, en los alrededores del Ayuntamiento, así como en las proximidades del Mercado del Fontán, hay multitud de bares, cafeterías y restaurantes en los que reponer fuerzas.

Sábado

Si se dispone de coche para desplazarse, es altamente recomendable hacer un ‘tour’ por el prerrománico asturiano. En él podremos encontrar desde diversas iglesias a pocos minutos del centro hasta las construcciones más importantes de esta época: Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo. A tan sólo unos minutos de estas edificaciones se sitúa el Pico Paisano, desde el que se gozarán de unas vistas privilegiadas de Oviedo y donde se podrán hacer fotografías que valen la pena. Si además eres amante del senderismo, en el Naranco existen diversas rutas para hacer a pie o en bici, así como la Pista Finlandesa y otras sendas alrededor de la ciudad.

Santa María del Naranco

Santa María del Naranco es un palacio situado a las afueras de Oviedo, a unos cuatro kilómetros, declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad en 1985. En su origen no estaba vinculado a la ...
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Domingo

El último día se puede reservar para acudir a algunos de los museos más destacados de la ciudad, como puede ser el caso del Museo de Bellas Artes, el Museo Arqueológico o la Cámara Santa. Además, si estás interesado en el mundo del fútbol, puedes iformarte para ir al Estadio Carlos Tartiere a ver un partido del Real Oviedo, equipo de la ciudad que actualmente juega en la Liga 123.

A lo largo del día, tanto la calle Gascona como la Ruta de los Vinos son una muy buena opción para descubrir la gastronomía asturiana. La bebida típica de la tierra, la sidra, y platos como el cachopo o la fabada asturiana son algunos de los protagonistas de estas calles de restauración y ocio.